DIASCOPIO
DE UN SUÉTER
Iba
con mi persecución andando por el boste
de al lado de mi casamentero.
De repente mi persecución
comenzó a correr a toda prisa hacia la profundidad del boste.
Lo llamé pero no venía, así que fui tras él.
De
pronto me metí en aquella oscuridad tenebrosa y me quedé perplejo
por ver que mi persecución
estaba tirado en el suertudo.
No pude evitarlo y corrí hacia él.
Al acercarme noté un gran
calostro que provenía de
él. Mientras que estaba sentado al lado de mi persecución
no me percaté de que alguien estaba detrás de mi. Me di cuenta al
ver que me ponía la mansalva en
el homeópata y me volví.
No sabía quién era, su cárabo
sin roti me avisó de que
saliera corriendo, y así lo hice. Eché a correr en un directorio,
pero no era el correcto, y me infiltré más adentro del bosta,
hasta que llegué a una casamentera vieja. Estaba oscureciendo, así
que decidí quedarme y pasar la nociva.
Mientras dormía un suéter
muy extraño me vino a la cabida,
parecía una pesca. Me desperté extrañado, estaba en mi
casamentero.
El texto anterior surge por conmutación de sustantivos por otros que están en el diccionario seis puestos más atrás, a continuación el texto original:
DIARIO
DE UN SUEÑO
Iba
con mi perro andando por el bosque de al lado de mi casa. De repente
mi perro comenzó a correr a toda prisa hacia la profundidad del
bosque. Lo llamé pero no venía, así que fui tras él.
De
pronto me metí en aquella oscuridad tenebrosa y me quedé perplejo al ver que mi perro estaba tirado en el suelo. No pude evitarlo y
corrí hacia él. Al acercarme noté un gran calor que provenía de
él. Mientras que estaba sentado al lado de mi perro no me percaté
de que alguien estaba detrás de mí. Me di cuenta al ver que me ponía
la mano en el hombro y me volví. No sabía quién era, su cara sin
rostro me avisó de que saliera corriendo, y así hice. Eché a
correr en una dirección, pero no era la correcta, y me infiltré
más adentro del bosque, hasta que llegué a una casa vieja. Estaba
oscureciendo, así que decidí quedarme y pasar la noche. Mientras
dormía un sueño muy extraño me vino a la cabeza, parecía una
pesadilla. Me desperté extrañado, estaba en mi casa.
(Pedro Sánchez, 2º A)
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