VES, TENÍA RAZÓN...
Era
martes, martes 13, esa noche mi amiga se quedaba en mi casa porque
mis padres no estaban. Ella decía que los martes 13 pasaban cosas
muy extrañas, yo aguantando la risa le dije que eso era una
tontería.
A mitad de la noche se fue la luz, bajé las escaleras
tropezándome con todo ya que la oscuridad no me permitía ver, miré
si había saltado el automático pero no todo estaba bien.
Llamé a
mi amiga de un grito, pero no contestaba, subí las escaleras
corriendo pero con cuidado, cuando llegué arriba no había nadie solo
se escuchó una voz que decía:
“ves, tenía razón...”
(Adriana Sánchez)