EL ELEFANTE AZUL
Ha estado conmigo
en todo momento, de risas y de llantos, de alegría y de tristeza.
Iba conmigo a todas partes, viajaba, dormía, andaba pero siempre con
él, a todas partes, fuese donde fuese.
Era mio, y eso me gustaba,
nada ni nadie me lo podía quitar. Fue el mejor regalo para una niña
de cuatro años, el regalo de un abuelo al que quiero muchísimo y al
que pese a todo lo que ha sufrido sigue luchando por su vida y por
ver feliz a los suyos.
El tiempo y la edad me fueron separando de él,
la vida me abrió nuevos caminos y el suyo se cerró. Todavía cuando
entro en mi cuarto y lo veo me acuerdo de todos esos momentos que
viví junto a él, estuvo conmigo en las peores y en las mejores.
Nunca olvidaré a ese elefante azul.
(MARÍA ALBA ALMAZO, 2ºC)
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