Me
encantaban tus ojos que me hacían brillar
Me
encantaba tu risa que me hacía suspirar
Me
encantaba tu sonrisa que me hacía desmayar
Me
encantaba tu pelo que me hacía soñar.
Ya
mi corazón no soporta que te despidas.
Ya
no oigo la dulce voz que me suspira
Ya
la atroz manera en la que te separaste…
hará
que no vuelva a salir de mi guarida.
Marius
Curt y Samuel Mateo Cabrera, 4º A
No hay comentarios:
Publicar un comentario